↦ BUCLE DEL TIEMPO, AVIÓN QUE NUNCA ATERRIZÓ EN EL AEROPUERTO DE BARCELONA




Existen muchos casos misteriosos que nos acompañan a lo largo de la historia, dejando a su paso señales que atraen a algunas mentes humanas. Uno de esos misterios son los lugares donde han ocurrido hechos trágicos que dejan algo impregnado, por el sufrimiento que se vivió aquel dramático día, repitiéndose eternamente.  En este artículo quiero explicaros un caso misterioso sobre un avión desaparecido a pocos kilómetros de Barcelona, en el año 1970, lo curioso es que se desvaneció en extrañas circunstancias. Ningún pasajero pudo contar la verdad de lo sucedido, nadie sobrevivió al accidente. En la actualidad, testigos aseguran que han visto sombras por los alrededores donde se hallaron los restos del avión.

montaje ayer y hoy


En la tarde del día 3 de julio de 1970, el avión De Havilland DH-106 Comet 4, matrícula G-APDN, de la compañía Dan Air, un vuelo “Charter” con 112 personas a bordo, se estrelló en la montaña del Montseny (Barcerlona), nadie salió con vida. La trágica historia de este accidente, fue que la compañía “Dam-Air”, estableció contacto con el centro de control del aeropuerto del Prat (Barcelona) poco antes de las 8 de la noche del día del accidente. Los pilotos informaron que se encontraban a siete minutos de Sabadell (Barcelona), pidiendo permiso para aterrizar. A los tres minutos el centro de control pidió que confirmasen si sobrevolaban Sabadell, a lo que los pilotos contestaron que en 30 segundos pasarían la ciudad. Al poco tiempo el comandante de la aeronave efectuó la llamada diciendo: “Pasando Sabadell ahora”. El centro de control observó un eco en la pantalla del radar, precisamente sobre Sabadell, en aquel momento comenzaron a comunicarse con la aeronave para informarles de los grados y el rumbo que debían tomar para efectuar el aterrizaje. Al acabar, esperaron la llamada de confirmación del comandante del avión, pero no obtuvieron respuesta. El avión nunca llego aterrizar.
Lo curioso es que los restos del avión se encontraron a más distancia de Barcelona de la que ellos comunicaron al centro de control, en la magnífica montaña del Montseny, reflejando el brutal impacto que debieron sufrir al ver los restos que quedaron esparcidos por un gran radio de distancia, el aparato se había desintegrado por completo. Parece ser que el avión se estrelló contra la montaña por la poca visibilidad que había aquel día por la densa niebla que tapaba la montaña. La localización de los restos del avión, con 105 turistas y 7 tripulantes, fue una auténtica odisea. Mandaron equipos de rescate por las zonas de Manresa, Sabadell y Terrassa. Al final localizaron los restos gracias a tres jóvenes que fueron testigos de que aquella misma tarde vieron sobrevolar un avión a muy baja altura por el Montseny, no alarmaron a las autoridades, porque no oyeron ninguna explosión ni sonido extraño. Pero al día siguiente al ver las noticias por la mañana, se pusieron en contacto con la Guardia Civil. El primer resto hallado del avión, fue una pequeña parte del fuselaje que pertenecía a la cola, el tamaño no era mayor a un coche. Se creyó que fue el lugar exacto del impacto contra la montaña, a una altitud de 1.100 metros. Otros restos se encontraban colgados en los arboles a una distancia de 200 y 300 metros y las ruedas del tren de aterrizaje a unos 700 metros del lugar del impacto. Después empezaron a hallar más restos esparcidos sobre la vegetación de la ladera, observando que en algunos tramos se podrían ver restos de los cuerpos de los ocupantes del avión y algunos elementos del aparato. Algunos cuerpos estaban colgados entre las ramas de los árboles. El rescate fue bastante complicado, había un difícil acceso al lugar del siniestro. Los bomberos, ambulancias y voluntarios pidieron excavadoras para poder hacer un camino hacia el lugar de los hechos. Las primeras víctimas fueron trasladadas al municipio de Arbucias. Los equipos de rescate tenían que sobreponerse al estado de los cuerpos que se iban encontrando, fue una estampa dramática.
 Unas de las teorías que se barajan sobre el motivo del accidente, es que los pilotos confundieron Sabadell con el pueblo de Berga, situado a sesenta kilómetros, a más distancia, en la misma aero-vía respecto a Sabadell. Pero se podría descartar, ya que era difícil que se cometiera ese error, porque existe un radio-faro que permite, con toda seguridad, registrar el paso por donde va el avión.
El día 8 de julio del mismo año, la “Caja negra” del avión siniestrado, llegó a Londres en buenas condiciones, donde se desato una polémica sobre las causas del accidente. Los británicos criticaron, en un artículo publicado en “The Observer”, al aeropuerto del Prat, denunciando las malas condiciones de modernidad del tráfico aéreo internacional. La Embajada Española contestó demostrando que el aeropuerto catalán disponía de todas las instalaciones necesarias. Eso crea un estado de confusión entre los dos países, que al no saber cual fueron las causas reales del siniestro, se intentaban echar las culpas entre ellos. El caso sigue siendo un misterio.
Hay otro caso similar que sucedió diez años antes del siniestro del Comet 4, con un avión que realizaba el mismo vuelo “Charter” y con pasajeros británicos. Pero no son los únicos que fueron víctimas de la montaña del Montseny, hay tres casos de avionetas que tuvieron ese trágico destino:
-          El 20 de mayo de 1991, hallan el cadáver de un piloto cuya identidad se desconoce, se descubre que tres días antes, se precipita una avioneta en las inmediaciones del Montseny. Realizaba la ruta Ginebra – Sabadell.
-          El 21 de febrero de 1993, una avioneta de prácticas se perdió por la tarde en la montaña del Montseny. Despegó a las 5 de la tarde del aeropuerto de Girona y debía de aterrizar a los 40 minutos de vuelo, en el aeropuerto de Sabadell. El piloto realizaba un vuelo de prácticas como alumno de una escuela de vuelo. Cuando sobrevolaba por el Montseny, comenzó a perder el control del aparato, consiguió dar un aviso de emergencia. La avioneta era un “Piper PA-28”. Lo hallaron con vida, y pudo explicar lo sucedido. Su historia es de un auténtico superviviente. Al salir con vida del avión, caminó diez kilómetros durante más de diez horas con seis costillas rotas y a unas temperaturas de cero grados. La avioneta quedó a unos cinco metros por debajo de una carretera, pero el piloto no la vio y siguió vagando por el bosque. Lo encontraron débil y deshidratado.
-          - El 28 de mayo de 2000, un ciudadano inglés de 71 años, fue encontrado muerto en el interior de su avioneta, en la montaña del Montseny. Partió por la mañana del aeropuerto de Murcia y se dirigía a Perpiñán, en Francia, donde tenía que recoger a una persona para seguir el trayecto a Inglaterra. Sobre las 4 de la tarde se perdió su rastro. Comenzaron la búsqueda por la zona de Sabadell y la frontera de Francia, pero no hallaron ningún rastro del avión.  Después de varias horas de búsqueda, encontraron la avioneta en la montaña, dentro se encontraba el cadáver del piloto. La aeronave era una “Pipper MO-20” diseñada para vuelos de ocio.



¿Estamos ante un caso paranormal? Realmente es inquietante descubrir que justo en esa zona donde sucedieron estos accidentes, está dentro de un triángulo energético. El planeta está rodeado de corrientes energéticas, el Montseny es un vértice que junto a Montserrat y la montaña de Montjuic crean un triángulo energético. El territorio que queda en el interior de este triángulo crea un “hub” energético de gran intensidad. En especial Montserrat y el Montseny, son zonas donde muchos testigos aseguran a ver visto luces en el cielo y avistamientos ovnis. Sin ninguna duda aquella zona es inquietante, está llena de vibraciones energéticas y espirituales. Pero no es seguro que sean las causas de que estos accidentes ocurrieran en ese mismo lugar. Portales dimensionales o vértices de energía, es lo que ronda por aquella zona, la magia sigue su curso y el misterio abre puertas en la historia.

Comentarios

Entradas populares